Parásitos en mascotas

PARÁSITOS EN MASCOTAS. BACTERIAS, VIRUS, Y HONGOS

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Por su bienestar y salud, y la nuestra, nos ocupamos de mantener desparasitadas a nuestras mascotas.

Cuidamos su desparasitación externa, mediante sprays, collares antiparásitos, pipetas, y otros complementos, cómo el muy recomendable uso de la llamada tierra de diatomeas. Cuidamos su desparasitación interna.

Cuidamos de su alimentación, de su “flora bacteriana intestinal y colónica”, y con ello, de la fortaleza de su principal sistema inmunológico o de defensa frente a enfermedades.

Cuidamos de su higiene. Los vacunamos. Mantenemos limpios sus utensilios como comederos y bebederos. Retiramos y eliminamos constantemente los restos del arenero de nuestros gatos. Limpiamos el entorno, recurriendo a veces incluso, a la limpieza con vapor y a la desinfección química.

 

Y sabemos que, en hogares con mascotas, una higiene personal estricta es la mejor medida preventiva frente a las infecciones. Siempre, siempre, hay que lavarse las manos, con agua corriente y jabón, tras haber estado en contacto con perros y gatos u otros animales.

Pero,  ¿sabemos realmente la importancia de estos gestos cotidianos? ¿por qué tipo de parásitos y agentes patógenos pueden verse afectadas nuestras mascotas y qué consecuencias pueden ocasionar?, ¿cómo se transmiten?. Por ejemplo, muchos parásitos intestinales cursan asintomáticos en perros y gatos, por lo que pueden pasar desapercibidos. La mayoría de las infecciones por toxoplasma  en el hombre, se han adquirido por la ingestión de carne, agua o tierra contaminadas, mientras que el contacto directo con los gatos no constituye un factor de riesgo, exceptuando la materia fecal contaminada.

En este post relacionaremos los principales ectoparásitos, parásitos internos, bacterias, virus, y hongos, que pueden afectar al bienestar y salud de nuestros hogares con mascotas.

ECTOPARÁSITOS

Parásitos son organismos que requieren de un huésped viviente para obtener su alimento. Y varían enormemente en su complejidad, desde organismos unicelulares “simples” como las amebas, hasta gusanos.

Los parásitos externos o ectoparásitos, son parásitos que viven en la superficie de otro organismo, en las capas superficiales de la piel,  y subsisten de él. Cómo los mosquitos, chupadores de sangre temporalmente. O cómo los ácaros, pulgas, piojos, garrapatas, etc, que se adhieren a la piel y permanecen allí durante períodos de tiempo más largos.

Los ectoparásitos pueden causar, tanto a animales cómo a humanos, graves daños, y enfermedades. Pueden transmitir patógenos que causan enfermedades. Y son un factor altamente predisponente a la proliferación de hongos y bacterias; ya que producen heridas que dañan la piel, hacíendola más vulnerable frente a éstas y otras infecciones.

Ácaros

Distintos tipos de ácaros, cómo el sarcoptes scabiei, o el demodex canis/o catis (unos arácnidos microscópicos), pueden producir distintos tipos de sarna; cómo la sarna sarcóptica o canina ( o escabiosis) y la sarna demodécica.

La sarna es una enfermedad cutánea muy contagiosa, que se caracteriza por un picor intenso, que puede provocar importantes lesiones en la piel, y folículos pilosos, del animal. Y puede afectar a perros, gatos, otros animales, y humanos.

Pulgas

La picadura de la pulga (pulga del perro o ctenocephalides canis)​, produce una gran irritación, y puede ser causa de dermatitis alérgica por componentes irritantes que posee su saliva.

Además, pueden transmitir la tenia dipylidium caninum  que es un parásito intestinal suceptible de zoonosis.

Mosquitos

Los mosquitos pueden transmitir a nuestras mascotas, patógenos que causan enfermedades.

Por ejemplo, los mosquitos flebotomos, son vectores responsables de la propagación de la leishmaniasis, una enfermedad parasitaria causada por el protozoo intracelular del género leishmania.

El mosquito culex  transmite el virus del oeste del Nilo, que afecta al sistema nervioso de animales y de humanos, pudiendo, la llamada fiebre del virus del nilo, ser causa de muerte en mascotas inmunodeprimidas.

Garrapatas

La garrapata marron del perro puede transmitir bacterias que causan enfermedades como la erliquiosis o la anaplasmosis; también la garrapata común puede transmitir la bacteria que causa la anaplasmosis.

Garrapatas, piojos y otros ectoparásitos, pueden transmitir la bacteria que causa la borreliosis o enfermedad de Lyme.

Si no desparasitamos periódicamente a nuestras mascotas, antes o después podremos encontrarnos con graves problema de infectación, que afectarán tanto a su salud y bienestar, cómo a la del resto de la familia. Sin entrar en que, puedan llegar a ocasionarse incluso, por omisión, incidentes de emergencia zoosanitaria contemplados legalmente.

PARÁSITOS INTERNOS

Nuestras mascotas, cómo las personas, pueden también infectarse de una serie de parásitos internos o endoparásitos. Unos pequeños organismos, muy diversos, cómo protozoos, y gusanos internos (redondos o planos), que pueden atacar sus intestinos, u otros órganos vitales, cómo el corazón o los pulmones. Que, en los casos más graves y de coinfección con virus y bacterias, pueden causar su muerte. Y que, en algunos casos, pueden transmitir a los humanos (lo que se conoce como zoonosis = enfermedad infecciosa que puede transmitirse entre el hombre y otros vertebrados).

PROTOZOOS

Protozoos, o protozoarios, son organismos microscópicos, unicelulares, y eucarióticos (aquellos cuyas células poseen un núcleo limitado por una membrana nuclear), pertenecientes al reino protista o protoctista (aquel que engloba a todos los organismos eucarióticos que no pueden clasificarse en alguno de los otros tres reinos : hongos, animales, o plantas), que suelen colonizar el intestino de nuestras mascotas, y se alimentan de los nutrientes que éstas ingieren.

Por su morfología, se pueden clasificar en, flagelados y coccidios.

Flagelados

Son protozoos morfológicamente caracterizados por la presencia de uno o más flagelos que dotan de movilidad al organismo, como:

giardias

Especies de giardia, cómo giardia lamblia (de procedencia exclusivamente humana), y giardia intestinalis o duodenalis (de origen animal), pueden infectar a un rango muy amplio de vertebrados, incluyendo al perro y al gato.

La giardiasis se manifiesta en mascotas, especialmente cachorros, con diarreas.

tritrichomonas

Tritrichomonas foetus, es un parásito del aparato reproductor de bovinos, suinos y equinos, siendo solo patógeno en bovinos.

Pero también se ha identificado en el tracto digestivo en felinos, causándoles diarrea. Y también se ha aislado en alguna ocasión en perros.

leishmania

Leishmania infantum, es un protozoo que infecta a un mosquito llamado flebotomo, que, cuando tras estar infectado pica a un perro (u otros vertebrados, incluido el hombre), le contagia la temida enfermedad, potencialmente letal, leishmaniasis, que puede afectar a su piel y órganos internos.

Y coccidios

Son protozoos morfológicamente caracterizados por presentar un complejo apical en el que se localizan diferentes organelos que les permiten invadir y replicarse en la célula huésped. cómo:

cystoisospora

Cystoisospora canis, cystoisospora ohioensis, y cystoisospora burrows, son especies que comúnmente infectan a los perros.

Cystoisospora felis y cystoisospora rivolta, infectan a gatos.

Les  pueden producir una infección gastrointestinal, que puede cursar, desde asintomática en adultos; a cuadros de diarrea líquida, vómitos, anemia, deshidratación, fiebre, depresión, en individuos jóvenes y en inmunodeprimidos; e incluso la muerte, en casos graves si la enfermedad no es tratada.

Son muy especificos del correspondiente hospedador, por lo que la coccidiosis o cystoisosporosis en gatos y perros no tiene ninguna implicación zoonósica.

cryptosporidium 

El género cryptosporidium puede infectar células del tracto gastrointestinal, en animales y humanos.

Cryptosporidium parvum es una especie con poca especifidad de hospedador, parasitando principalmente a rumiantes y a otros mamíferos como el hombre, y ocasionalmente a perros y gatos.

Cryptosporidium canis, se ha aislado principalmente en perros.

Cryptosporidium felis, que infecta principalmente a gatos, también se ha aislado de rumiantes y del hombre.

Estos parásitos pueden llegar hasta nuestras mascotas a través de las heces de un huésped infectado, o por la ingestión desde el medio ambiente, agua, tierra, etc. Causándoles, la criptosporidiosis, gastroenteritis y diarreas.

neospora

Neospora caninum, es un protozoo del que es hospedador definitivo el perro y otros cánidos silvestres, y hospedadores intermedios ovinos, caprinos, y bóvidos. Es una de las principales causas de aborto en las vacas. La transmisión al perro se produce principalmente por la ingesta de placentas y de tejidos fetales de animales infectados.

La neosporosis canina cursa con sintomatología principalmente neuromuscular, que suele provocar parálisis que se inicia en las patas traseras y que puede progresar, y en los cachorros puede ser letal.

hammondia

Hammondia hammondi y hammondia heydorni, parasitan, respectivamente, a perros y gatos, principalmente a través de la ingesta de carne contaminada de hospedadores intermediarios, que lo son sobre todo los roedores y los rumiantes.

Pueden causarles anorexia y diarreas graves, aunque generalmente cursan asintomáticos.

sarcocystis

Varias especies del género sarcocystis parasitan gatos y perros, que son los hospedadores definitivos. Siendo hospedadores intermediarios, animales herbívoros y omnívoros (cómo ovejas, vacas, cerdos con acceso al exterior).

toxoplasma

Mención especial merece el protozoo coccidio toxoplasma gondii, un parásito intracelular, del que sólo son hospedadores definitivos el gato y otros felinos (aunque es rara la presentación de síntomas graves en el gato por toxoplasmosis), pero todos los mamíferos, el hombre, el perro y el gato, y los pájaros, pueden actuar como hospedadores intermediarios.

Se trata de uno de los agentes zoonósicos más prevalente en el mundo, destacando el dato de que, trabajar en la industria cárnica se asocia de forma significativa a la adquisición de la infección, llegándose a considerar la  toxoplasmosis como enfermedad profesional. Cursando grave local (principalmente ocular o cerebral) o generalizada, especialmente en individuos inmunocomprometidos y niños infectados in utero.

GUSANOS INTERNOS

Nuestras mascotas también pueden ser parasitadas por gusanos internos, científicamente denominados vermes. Clasificados, por su morfología, en, nematodos, cestodos, y trematodos.

Nematodos

Nematodos son gusanos o vermes redondos, destacando, por lo que respecta a nuestras mascotas:

toxocaras

Del género ascarídidos, los vermes toxocara canis y toxocara cati, son unos parásitos intestinales de unos 10 cm, muy frecuentes en cachorros. Suelen parasitar tanto a perros como a gatos menores de 6 meses, aunque también se observa en animales adultos.

Toxascaris leonina, es un tipo de gusano blanco y redondo, de aspecto similar al toxocara canis, que se encuentra en perros, gatos, zorros y especies anfitrionas relacionadas.

Son parásitos intestinales que pueden afectar también a humanos (dar lugar a casos de zoonosis). La toxocariosis puede cursar con fiebre, anorexia, inflamación heptática, erupciones rojizas en la piel, , neumonitis, asma o alteraciones visuales.

trichuris vulpis o gusano látigo

El tricúrido trichuris vulpis, conocido cómo gusano látigo, es un gusano de 7 cm de largo, con una cabeza fina y extremo grueso. Infecta a perros, zorros, lobos y otros cánidos salvajes, ubicándose en el intestino grueso, o ciego, donde se fija a las paredes, originando la enfermedad parasitaria tricurosis. Produce dolor abdominal y, en las infecciones graves, anemia y desnutrición.

ancilostomas o gusanos redondos con gancho

Los ancilostomas (nematodos estróngilos ganchudos, o gusanos redondos con gancho) ancylostoma caninum, y uncinaria stenocephala, pueden afectar a gatos y perros. Viven en los intestinos, pudiendo cursar la anquilostomiasis, con diarrea, en ocasones sanguinolienta, anemia y desnutrición; y también pueden penetrar la piel y provocar problemas cutáneos.

gusanos del corazón

También hay nematodos que pueden afectar alcorazón y pulmones de nuestras mascotas, como:

Dirofilaria immitis, conocido cómo gusano del corazón, que genera la filariosis, una enfermedad cardiaca y/o pulmonar grave y potencialmente mortal. Un parásito propio del perro, que es su hospedador definitivo, pero puede infestar gatos, ganado, zorros, coyotes, hurones, leones marinos y, en muy raras ocasiones, al hombre.

Y angiostrongylus vasorum, o  gusano del corazón francés, que provoca la enfermedad angiostrongilosis canina en perros. No es zoonótica.

Cestodos

Cestodos son gusanos o vermes planos o tenias. Algunos muy conocidos, como las tenias dipylidium caninum y echinococcus granulosus, o tenias del perro, que pueden parasitar en mascotas como los perros y gatos, viviendo en su intestino delgado, así como trasmitirse a las personas.

dipylidium caninum

Dipylidium caninum, que en su forma adulta puede llegar a medir hasta 70 centímetros de largo y unos 3 milímetros de diámetro, puede ser transmitida por la picadura de la pulga.

Los síntomas de dipilidiasis cursan con diarreas, pérdida de peso, sangre en las heces y anemia.

echinococcus granulosus

Echinococcus granulosus, también conocido como gusano de la hidátide, es un verme plano, de sólo 7-9 mm de longitud, una de las tenias más pequeñas.

Las manifestaciones clínicas de la equinococosis, se deben a la formación de quistes y varían en función del órgano afectado, el número de quistes, su tamaño, su desarrollo y la presión que ejercen sobre los tejidos u órganos adyacentes. La hidatidosis o quiste hidatídico es la manifestación más frecuente, debida a la formación de quistes dañinos de crecimiento lento, normalmente en el hígado, seguido de los pulmones y otros órganos. (insst.es)

Trematodos

Trematodos son gusanos o vermes planos en forma de hoja de arbol. Cómo echinostoma.

echinostoma

 

El echinostoma es un parásito intestinal que tienen como húespedes intermadiarios a moluscos bivalvos o pescado, y se propaga cuando los humanos o los animales toman como alimento éstos húespedes intermediarios infectados crudos o poco cocidos.

De tamaño reducido, entre 5 a 15 mm de largo, 1 a 3 mm de ancho y 0,5 a 0,6 mm de espesor.  Los aspectos clínicos han sido pocos estudiados. En general, es poco patógeno. Cuando la carga parasitaria es grande, puede haber cólicos intestinales y diarrea.

 

Muchos de estos pequeños organismos, los endoparásitos, tienen ciclos de vida complejos, desde fases microscópicas, hasta ser incluso perceptibles a simple vista, y pueden requerir más de un hábitat u hospedador para completar su madurez, pudiendo incluir etapas de supervivencia al aire libre.

Así, pueden llegar hasta nuestras mascotas, a través de anfitriones intermediarios, cómo pulgas, garrapatas, mosquitos… También,  también a través de las heces de un huésped infectado  (por transmisión fecal-oral). O, por contaminación ambiental, por la ingestión desde el medio ambiente, agua, tierra, andar descalzos en lugares infectados con larvas, jardines, céspedes, porches, patios, etc; ya que los huevos de algunas especies, una vez excretados desde las heces, pueden, de forma inmediata, o tras periodos de entre 1 y 3 días, esparcirse en esporas al medio exterior.  O por la ingestión de carne cruda o poco hecha de otros animales infectados.

Este último es el caso más frecuente del protozoario toxoplasma gondii, cómo vimos, uno de los agentes zoonósicos más prevalente en el mundo.

Los síntomas en nuestras mascotas, dependiendo de la especie de endoparásito, pueden variar, desde ausencia de signos clínicos y diarreas transitorias, en la mayoría de los casos, a, diarreas mucosas y/o con sangre, intermitentes o bien persistentes, incontinencia fecal, anorexia, vómitos, dolores abdominales, pérdida de apetito y apatía, que, en los casos más graves y de coinfección con virus y bacterias, pueden llegar a causarles la muerte. También se ha podido observar atrofia muscular, alteraciones oculares, y disfagia (dificultad para tragar), dermatitis ulcerativa, miocarditis, neumonía y pancreatitis; y en los cachorros, parálisis creciente incluso letal, pudiendo afectar a varios miembros de una misma camada. 

BACTERIAS

Las bacterias, son organismos microscópicos unicelulares que crecen y se multiplican por toda la Tierra, pudiendo, a diferencia de los parásitos, sobrevivir aisladamente, fuera del cuerpo de animales y de humanos, por ejemplo en una mesada, o en asociación, beneficiosa, o perjudicial, con otros organismos vivos.

Por su estructura, las bacterias son procariotas. Es decir, a diferencia de las células eucariotas (cómo las de los hongos, animales, plantas, y protistas cómo los protozoos), no tienen un núcleo diferenciado ni orgánulos internos, encontrandose su ADN disperso en su espacio interior o citoplasma. Están delimitadas por una resistente pared celular, que les permite sobrevivir en diferentes condiciones ambientales, cómo altas y/o bajas temperaturas. Muchas bacterias disponen de flagelos o de otros sistemas de desplazamiento y son móviles. Y, pueden reproducirse de forma autónoma, por división, sin necesidad de otro organismo.

No todo tipo de bacterias son perjudiciales. Hay bacterias útiles y beneficiosas, en asociación con otros organismos vivos. Cómo por ejemplo, las de los géneros lactobacillus y bifidobacterium contenidas en leches fermentadas y otros determinados derivados lácteos, cómo el yogur o el kéfir, que forman parte de la flora bacteriana intestinal y colónica; y que son consideradas probióticos.

En cambio, y, sobre todo en mascotas inmunodeprimidas o con sistemas inmunitarios debilitados y/o con enfermedades subyacentes, las infecciones por bacterias perjudiciales pueden provocar enfermedades graves a nuestras mascotas, tales cómo: estafilococos, erliquiosis, colibacilosis, salmonelosis, tuberculosis, listeria, anaplasmosis, tétanos, campilobacteriosis, borreliosis o enfermedad de Lyme, leptospirosis o enfermedad de Weil o ictericia de Weil

Veámos algunas de las posibles infecciones bacterianas más conocidas en nuestras mascotas, partiendo de la clasificación de las bacterias, por su morfología más frecuente, en cocos, bacilos, y otras, cómo vibrios y espirilos.

Cocos

Cocos son bacterias con formas esféricas.

Tras dividirse pueden dar lugar, cómo asociaciones más frecuentes a: diplococos (o cocos en grupos de dos), tetracocos (cocos en grupos de cuatro), estreptococos (cocos o diplococos en cadenas), o estafilococos (cocos o tétradas en racimo).

Nuestras mascotas pueden infectarse con:

estafilococos

Las bacterias del género estafilococos son habitantes normales de la piel y de las membranas mucosas de todos los mamíferos y aves. Pero, cepas patógenas de este género pueden causar, en individuos inmunodeprimidos, dermatitis bacterianas que pueden llegar a complicar otros órganos.

Cómo, staphylococcus aureus, del que las fosas nasales de las personas es el principal nicho, y que puede generar osteomielitis o infecciones óseas. O staphylococcus pseudintermedius, que colonizan principalmente la cavidad oral y la piel y folículo spilosos de la zona perianal en mascotas; siendo otros puntos de infección cutánea típicos de los estafilococos en mascotas, el tronco, los codos y la zona entre los dedos; en los cachorros, las zonas infectadas suelen estar en el vientre.

Los estafilococos, pueden producirles dermatitis con síntomas semejantes a los de la “tiña felina”, e inflamaciones que, si no se tratan, pueden extenderse al corazón, los huesos y las articulaciones. S. pseudintermedius no coloniza de forma habitual al ser humano, pero la transmisión entre el perro y su dueño es posible.

ehrlichia canis

La bacteria cocoide ehrlichia canis, se transmite principalmente por mordedura de la garrapata marrón del perro o garrapata café del perro (rhipicephalus sanguineus). Y produce la erliquiosis, que cursa con anemia, además de afectar a la médula ósea y al sistema inmunitario de los perros. Afecta ppalmente a perros, aunque se ha documentado también en felinos y humanos.

Bacilos

Bacilos son bacterias con formas cilíndricas alargadas o de bastoncillos.

Cómo variantes y asociaciones más frecuentes, resultan: cocobacilos (son bacilos cortos con forma irregular), diplobacilos (bacilos en grupos de dos), y estreptobacilos (bacilos o diplobacilos en cadenas).

Nuestras mascotas pueden infectarse con:

escherichia coli

La escherichia coli (e. coli), es una bacteria que forma parte de la flora intestinal de organismos de sangre caliente, personas y animales, y que se puede encontrar también en el medioambiente, y en los alimentos y el agua sin tratar.

La mayoría de tipos de escherichia coli son inofensivos y parte de un tracto intestinal sano. Pero existen cepas de escherichia coli que tienen propiedades patógenas, causando colibacilosis, que cursa con diarrea, incluso hemorrágica, y vómitos (e. coli diarreogénicas o Intestinales), pudiendo producir también infecciones urinarias, e infección de útero en hembras, enfermedades respiratorias, e infecciones del torrente sanguíneo (e. coli patogénicas extraintestinales).

“La alta morbilidad, así como la variedad en síndromes y cuadros clínicos asociados a las infecciones por E. coli, hacen de esta bacteria uno de los patógenos más versátiles y de mayor relevancia para el ser humano” (wikipedia.org). Pueden propagarse a través del agua o alimentos contaminados, y del contacto con animales o personas.

salmonella

Salmonella, es un género de bacterias intestinales de las que son portadores primarios los reptiles y las aves, y se expulsan a través de las heces. Pudiendo infectarse otros animales y humanos, fundamentalmente a través de la ingesta de carnes contaminadas. “La OMS, señala que la salmonelosis es: una de las enfermedades de transmisión alimentaria más comunes y ampliamente extendida. Agrega además que: la mayoría de los casos de salmonelosis son leves, aunque, en ocasiones, la enfermedad puede causar defunción”. (fesemi.org).

Los síntomas de la salmonelosis en nuestras mascotas, pueden variar en función de la cantidad de salmonelas ingeridas; diarreas leves o sanguinolentas, vómitos, fiebre, apatía; y en casos más graves, abscesos en órganos internos y trastornos del sistema nervioso.

mycobacterium

Bacterias cómo mycobacterium tuberculosis (Bacilo de Koch), mycobacterium bovis, y mycobacterium  avium, transmisibles vía aérea, son causantes de tuberculosis en animales y humanos.

listeria

La bacteria listeria monocytogenes, que puede sobrevivir en la tierra y el agua, puede infectar tanto a animales como a humanos, siendo uno de los patógenos causante de infecciones alimentarias más violentos, la listeria o listeriosis.

anaplasma

La bacteria anaplasma phagocytophilum, la transmiten la garrapata común (ixodes ricinus ) y la  garrapata café del perro (garrapata canina marrón, garrapata de perro, rhipicephalus sanguinus), cuando pican para chupar su sangre, al perro y quedan enganchadas más de 24 horas. La anaplasmosis cursa con anemia, fiebre y apatía.  

clostridium

Las baceterias del género clostridium, se encuentran ampliamente distribuidas en el medio ambiente y en la flora intestinal de animales y personas, pudiendo transmitirse a los alimentos.

En ausencia de oxígeno y poca acidez, producen una potente neurotoxina, la exotoxina tetanospasmina, que penetra en las fibras nerviosas motoras periféricas hasta llegar al sistema nervioso central, provocando parálisis y espasmos musculares. El tétanos en perros y gatos, es una enfermedad frecuentemente mortal. La bacteria produce esporas resistentes y provienen de casi cualquier parte, incluso del polvo de la calle o el suelo del jardín. La infección ocurre por la penetración de las esporas en las heridas contaminadas.

Otras

Otras formas bacterianas son los vibrios vibriones, que son bacterias con formas de cocobacilos pero con una curvatura, con distintos aspectos, cómo comas o judías. Y los espirilos, o bacterias con formas helicoidales o espirales, de manera que, presentan varias curvaturas replegadas sobre sí, distinguiéndose unas estructuras más rígidas, y otras  más flexibles o en tirabuzón (espiroquetas).

campylobacter

Campylobacter “.. son bacilos, por lo general con forma espiralada, de S o curva. Actualmente, el género campylobacter comprende 17 especies y seis subespecies, de las cuales las detectadas con más frecuencia en enfermedades humanas son c. jejuni (subspecie jejuni) y c. coli...” (who.int)

Es una bacteria intestinal de la que pueden ser portadores perros y gatos, así como otros animales, que las expulsan a través de las heces. Las personas casi siempre resultan infectadas por comer o beber agua o alimentos que contienen la bacteria, siendo La bacteria campylobacter causa frecuente de enfermedades gastrointestinales bacterianas relacionadas con los alimentos. La infección bacteriana por por campylobacter, campilobacteriosis, provoca diarrea que puede ser sanguinolienta, cólicos, nauseas, vómito, dolor abdominal y fiebre.

borrelia

Borrelia  es una bacteria espirilo, que se transmite a través de las garrapatas, piojos y otros invertebrados como vectores de infección, causando fiebre e infecciones en humanos. La llamada borreliosis o enfermedad de Lyme (localidad estadounidense, en Connecticut, a que debe su nombre), es la enfermedad más diagnosticada en humanos en relación con una picadura de garrapata, pero los perros también la sufren.

leptospira

Leptospira es una bacteria espirilo propia de climas cálidos y húmedos, de la que son huéspedes primarios especialmente animales salvajes cómo roedores. Pudiendo infectarse otros animales y humanos, al beber o tener contacto con agua, tierra, u objetos, que hayan sido contaminados por orina o líquidos corporales de animales infectados.

La llamada leptospirosis o enfermedad de Weil o ictericia de Weil, puede causar daños orgánicos mortales en perros jóvenes e inmunodeprimidos. Los órganos más afectados son el hígado y los riñones; los órganos sexuales, el sistema nervioso y otros órganos también se pueden ver afectados, pudiendo alcanzar todo el organismo rápidamente a través del torrente sanguíneo.  Es una enfermedad altamente contagiosa, y zoonótica, que en humanos cursa con fiebre súbita, escalofríos, inyección conjuntival, dolor de cabeza, mialgia e ictericia.

Frente a las infecciones bacterianas se utilizan antibióticos, porque inhiben la formación de la pared celular de las bacterias, o detienen otros procesos de su ciclo de vida.

Pero la mejor protección siempre, para humanos y mascotas, es la prevención. Evitar el contagio, mediante medidas de higiene cotidianas rigurosas, corporales, y de su entorno, cuidando su agua y alimentos (dietas crudas pueden contener bacterias de salmonela, la listeria o escherichia coli), y manteniendo la salud de su sistema inmunitario, que son medidas que dificultan la aparición y oportunidad de supervivencia de infecciones bacterianas.

VIRUS

virus envueltos y no envueltos
Atribuciones de imágenes: 1 Rabies virus structure, CC BY-SA 4.0. 2 Manu5, H1N1 virus, CC BY-SA 4.0. 3 NIAID, Influenza A Virus (H3N2) (52747110292), CC BY 2.0. 4 Nephron, Parvovirus infection high mag, CC BY-SA 3.0. 5 CDC’s Public Health Image Library Image #5610 , Feline leukemia virus, marcado como dominio público, para más detalles véase Wikimedia Commons. 6 Maxistheman, Wikitarwin, Lexor on en.wikipedia, Virus-types, marcado como dominio público, para más detalles véase Wikimedia Commons. 7 Ca.garcia.s, Virus envueltos y no envueltos, CC BY 4.0.

“Los virus son agentes infecciosos microscópicos acelulares (no están hechos de células), que sólo pueden replicarse dentro de las células de otros organismos, cuyo metabolismo utilizan para replicarse y provocar así una enfermedad… ” (wikipedia.org). Es decir, cómo los parásitos, y a diferencia de las bacterias, los virus no pueden evolucionar de manera autónoma, y necesitan una célula autónoma hospedadora para reproducirse (de humanos, animales o plantas).

Morfológicamente, no tienen una estructura celular, sino que están compuestos de material genético (ARN/ ADN). Y se cubren de una envoltura proteica, o cápside, que encierra y protege su material genético y que les sirve además para el reconocimiento de las células a las que va a parasitar; esta cápside, formada por capsómeros, puede tener tres distintas formas: icosaédrica, helicoidal o complejas. Algunos virus presentan, además, otra envoltura membranosa que les rodea, que proviene de parte de la membrana externa de la célula huesped, ganando una bicapa lipídica externa conocida como envoltura viral (ej el virus de la influenza).

Algunas de las enfermedades virales más conocidas que pueden presentarse en mascotas, son: rabia, hepatitis canina infecciosa, parvovirosis, panleucopenia, moquillo, influenza o gripe, tos de las perreras, leucemia felina, e inmunodeficiencia felina, carcinoma de células escamosas cutáneo, fiebre del virus del nilo, enfermedad de Borna, o el llamado “cornavirus canino/felino”. 

Afectan a distintos órganos, y vienen provocadas por los siguientes virus: 

virus de la rabia (RABV)

El virus de la rabia (RABV), es un lyssavirus * tipo 1, perteneciente a la familia rhabdoviridae, que se encuentra en la saliva y el cerebro de los animales infectados, y se transmite por contacto de heridas con saliva infectada de animales enfermos, tanto domésticos como salvajes, frecuentemente por una mordedura. La rabia es una enfermedad zoonótica viral potencialmente mortal, que afecta al sistema nervioso (causando una encefalitis con una letalidad cercana al 100 %), y que cursa con fiebre, agresividad, irritabilidad, apatía, vómitos. Además de los perros, pueden contraerla otros mamíferos, como roedores, felinos, y las personas, y también los pájaros.

* Un lyssavirus, es un género de virus perteneciente a la familia rhabdoviridae.
Rhabdoviridae es una familia de virus que infectan animales, plantas, hongos y protistas. Entre los animales infectados están insectos, peces y mamíferos, incluidos los humanos. Estos virus presentan una forma alargada parecida a una bala, con una nucleocápside helicoidal y una envuelta lipídica de la que sobresalen glicoproteínas con forma de espícula.

adenovirus canino

El adenovirus canino del tipo 1 (CAV-1) o mastadenovirus canino A, es un virus que afecta al hígado y riñones en cánidos de todas las edades. Se contrae por la boca o nariz, se replica en las amigdalas, y posteriormente pasa al hígado y riñones. Se puede propagar a través de las heces, la orina, la sangre, la saliva y las secreciones nasales de los perros infectados

Causa la llamada hepatitis canina infecciosa (ICH), que puede cursar con fiebre, depresión, pérdida de apetito, tos y dolor en el abdomen. Y también pueden presentarse casos de edema corneal y signos de enfermedad hepática, como ictericia, vómitos y encefalopatía hepática; y trastornos hemorrágicos, que pueden causar la formación de hematomas en la boca. 

La enfermedad se puede confundir con el parvovirus canino porque ambos causan un recuento bajo de glóbulos blancos y diarrea sanguinolenta en perros jóvenes no vacunados.

parvovirus

El parvovirus afecta al tracto intestinal de los perros, infectando las células intestinales. Se expulsa a través de las heces, fundamentalmente, y es muy contagioso. Cursando la parvovirosis canina, con diarrea sanguinolenta y maloliente, junto con un deterioro del estado general del animal, y con alta probabilidad de muerte en cachorros e inmunodeprimidos y no vacunados.

parvovirus felino (FPV)

El parvovirus felino (FPV), que afecta al tracto intestinal de los gatos, es también altamente contagioso, pudiendo llegar a vivir en el entorno durante más de un año. Y es el causante de la panleucopenia felina o enteritis (inflamación intestinal) infecciosa felina.

virus del moquillo canino

El virus del moquillo canino, es un morbillivirus *, perteneciente a la familia paramyxoviridae, que afecta a los perros y otros animales cómo hurones y visones (no a los gatos domésticos, que sufren otro tipo de infecciones víricas de síntomas respiratorios, como la rinotraqueítis o calicivirosis), que pueden contagiarse mediante la inhalación de partículas virales, o por contacto directo con fluídos de otros animales infectados.

El moquillo, también conocido como distemper o enfermedad de Carré, es una enfermedad grave y muy contagiosa que puede afectar al aparato respiratorio, sistema digestivo y / o sistema nervioso. Y es frecuentemente causa de mortalidad en perros jovenes y no vacunados.

* Morbillivirus es un género de virus perteneciente a la familia Paramyxoviridae. Paramyxoviridae es una familia de virus que infectan animales.

virus de la influenza canina

El virus de la influenza canina es un virus específico de la influenza de tipo A, concretamente el A(H3N2), que se sabe que infecta a los perros, causando la enfermedad influenza canina o gripe de los perros. Una infección respiratoria contagiosa con sintomas similares a la humana, estornudos, fiebre o secreciones en los ojos y en la nariz.

* Existen cuatro tipos de virus de la influenza (gripe): A, B, C y D. Pudieran difinirse según el grado de gravedad/levedad y suceptibilidad de producir pandemia, en las temporadas de influenza estacional (inviernos).

Y a su vez, existen subtipos de virus de la influenza tipo A, que pueden causar infecciones a 7 especies específicas o grupos de animales diferentes, incluidos los seres humanos (aves acuáticas salvajes, aves de corral domésticas, cerdos, caballos, perros y murciélagos, y humanos).

Los subtipos del virus de influenza A, A(H1N1) pdm09 y A(H3N2), actualmente circulan entre las personas. La vacuna contra la gripe de cada año incluye variedades de ambas cepas y de la influenza B.

El subtipo del virus de influenza A, A(H3N8) o virus de influenza equina (caballos), por lo general circula entre los caballos y puede enfermarlos.

El subtipo del virus de influenza A, A(H3N2) o virus de influenza canina (perros), suele circular entre los perros y puede enfermarlos.

En otras muchas especies animales los virus de influenza aviar tipo A pueden causar infecciones, pero no se propagan regularmente entre ellas (p. ej., gatos y focas). (cdc.gov)

“tos de las perreras”

Varios agentes infecciosos respiratorios muy contagiosos, que combinan bacterias cómo la bordetella bronchiseptica (una bacteria cocobacilo que causa bronquitis infecciosas en vías respiratorias en cerdos y perros), y virus cómo el adenovirus canino tipo 2 y el virus de la parainfluenza, producen la rinotraqueítis o traquebronquitis infecciosa canina (TBI), también conocida cómo enfermedad de Kennel Cough o  tos de las perreras.

Afecta a las vías respiratorias superiores, con síntomas similares a la gripe humana, incluidas fiebre, tos, secreciones nasales y oculares, y posibilidad de agravamiento a cuadros de neumonía. La transmisión se produce vía aérea, principalmente entre perros (aunque se ha descrito algún caso de transmisión de perro a humano, en casos de niños, y de personas inmunodeprimidas y con problemas respiratorios previos); y viene favorecida por entornos de bajas temperaturas, falta de higiene, hacinamiento, estrés…

virus parainfluenza

Los virus parainfluenza son paramixovirus (conjunto de virus que infectan a animales) que infectan las vías respiratorias.

herpesvirus y calicivirus

Herpesvirus y calicivirus son virus que pueden afectar a las vías respiratorias de los gatos, y se transmiten mediante las secreciones orales, nasales y oculares. Ambos virus tiene síntomas similares pero el calicivirus presenta úlceras en nariz y boca mientras que el herpesvirus presenta úlceras en los ojos.

La rinotraqueítis felina o calicivirosis, conocidas cómo gripe felina, son enfermedades infecciosas respiratorias graves y contagiosas, de síntomas parecidos a la gripe, y que en los casos más graves producen la muerte, sobre todo en gatos jóvenes, o inmunodeprimidos y no vacunados.

virus de la leucemia felina (FeLV)

El virus de la leucemia felina (FeLV), es un retrovirus * específico de felinos, altamente contagioso, que infecta las células nada menos que, de su sistema inmunitario o de defensas, debilitándolo y dejándolo expuesto a variedad de enfermedades, incluídas anemia y cáncer, e infecciones secundarias, parasitarias, bacterianas… . Se transmite entre los gatos, fundamentalmente a través de la saliva (ej. lamidos entre gatos) o de las secreciones nasales, y también es posible por el contacto con orina o heces del gato infectado. La leucemia viral felina es una enfermedad muy grave, a menudo mortal, importando la carga vírica recibida, y la salud y fortaleza del sistema inmunitario del gato infectado para poder eliminarla o mantenerla bajo control.

* Retrovirus son virus que contienen ARN, y en los que no existe ADN, como material genético.

Diferencias entre el ADN y el ARN
diferencias entre el ADN y el ARN
Atribucion de imágen: Christinelmiller, Transcription and Translation, CC BY-SA 4.0

Para que lo entendamos, adninstitut.com lo explica genial: por lo que respecta a las células, el ácido desoxirribonucleico o ADN, molécula formada por dos cadenas largas que se enrrollan entre sí en una espiral, contiene la información genética (la “enciclopedia”) para ensamblar (sintetizar, fabricar) las proteínas. Y el ácido ribonucleico o ARN, molécula compuesta por una cadena lineal simple, vendría a ser cómo “el portador de un resumen de las instrucciones”. A nivel químico, ambas moléculas son muy similares, pero por sus características y su tamaño mucho más reducido, el ARN puede atravesar los poros de la membrana del núcleo de la célula (donde se encuentra el ADN) y llegar hasta el compartimento celular donde se ensamblan las proteínas.

Pues bien, “… en algunos tipos de virus no existe el ADN y la información genética se almacena directamente en cadenas de ARN. Así, cuando estos virus infectan una célula pueden directamente, y de manera más rápida, ensamblar proteínas víricas utilizando la maquinaria celular de la celula infectada, sin pasos adicionales. Algunos ejemplos de estos virus son el nuevo coronavirus SARS-CoV-2, el virus del sarampión, el del Ébola o el de la rabia”. Son ejemplos de retrovirus. Otros retrovirus son, los virus de la inmunodeficiencia humana y los virus de la leucemia de linfocitos T humana. Una vez que el retrovirus se integra en el DNA de la célula huésped, se transcribe utilizando los mecanismos celulares normales, para producir proteínas y material genético virales.

virus de la inmunodeficiencia felina (FIV)

El virus de la Inmunodeficiencia felina (FIV) pertenece a la misma familia de virus que el de la leucemia felina. Ambos son retrovirus específicos de felinos, y similares al VIH que causa el sida en los seres humanos. Ambos infectan a las células del sistema inmune del gato, dejándolo expuesto a enfermedades e infecciones secundarias, al reducirse su capacidad de defensa frente a agentes patógenos. Y, desde este punto de vista, de la inespecifidad de los síntomas de ambas enfermedades, diagnosticar leucemia o inmunodeficiencia felina (sida felino), puede ser complicado, por lo que los veterinarios recurren a test de laboratorio.

Ambas son enfermedades graves y altamente contagiosas, pudiendo transmitirse de forma oral y a través de la madre. Si bien, la principal forma de contagio de la leucemia felina es el lamido, porque el FeLV se concentra en saliva más que en el plasma sanguíneo, requiriendo un contacto prolongado y estrecho; siendo por ello una enfermedad tipica de colonias de gatos sin control sanitario.

Mientras que el virus de la inmunodeficiencia felina, presente también en la saliva y fluídos nasales, pero más concentrado en el plasma sanguíneo, se transmite con mayor probabilidad a través de mordiscos, y así, por peleas entre gatos. Se suele decir que, la leucemia felina es más propia de los gatos “amigables”, mientras la inmunodeficiencia felina es más propia de los gatos “enemistados”.

virus del papiloma canino (VPC)

El virus del papiloma canino (VPC), tiene predisposición para asentarse en la cavidad oral, aunque también se encuentra en el tejido de la superficie de la piel, el revestimiento de los órganos huecos y de las vías respiratorias, y el tubo digestivo. Y es causante, en perros y gatos, del carcinoma de células escamosas cutáneo.

virus del oeste del Nilo

El virus del Oeste del Nilo, es un arbovirus * transmitido por mosquitos, que afecta al sistema nervioso de animales y de humanos. La llamada fiebre del virus del nilo, puede causar la muerte en mascotas inmunodeprimidas.

* Arbovirus son virus que se transmiten por ciertas especies de artrópodos hematófagos, especialmente insectos (moscas y mosquitos) y arácnidos (garrapatas)

bornavirus

El bornavirus o virus de la enfermedad de Borna (VEB), afecta al sistema nervioso central en muchos animales vertebrados, siendo reservorios principalmente mamíferos de pequeño tamaño como las musarañas, los roedores y los topillos. Se puede transmitir vía respiratoria por inhalación del virus eliminado por la orina, heces y otros fluidos de animales infectados. La enfermedad de Borna cursa, entre otros síntomas, con movimientos rígidos e inestables, incapacidad para saltar y cambios en el comportamiento.

coronavirus canino/felino

Por último, y cómo curiosidad, saber que, cómo explica hospitalveterinariotrescantos.com, el conocido cómo “cornavirus canino/felino”, nada tienen que ver con el virus SARS-CoV-2 causante de la COVID-19. Sino que, se trata de cepas específicas de coronavirus que infectan el sistema respiratorio o al aparato digestivo de algunos mamíferos y aves como perros, gatos, ratones, murciélagos y algunos animales de granja como gallinas, vacas y demás; bien conocidas en la medicina veterinaria por su alta transmisibilidad, aunque ninguna causa enfermedades graves.

La variante tipo 1 del del coronavirus canino, conocida cómo coronavirus entérico canino, ataca a las microvellosidades del intestino delgado, cursando síntomas muy parecidos a los del parvovirus, pero menos profusos y graves.

La variante tipo 2, afecta al sistema respiratorio, cursando síntomatología respiratoria; y, en conjunción con otros virus y bacterias, es una de las causantes de la traqueobronquitis infecciosa canina o tos de las perreras.

El tratamiento frente a virus, es diferente al de las bacterias, ya que no se combaten con antibióticos (que pueden ser contraproducentes, pues debilitan las defensas o sistema inmunitario). Sino con antivirales, que son medicamentos que impiden que el virus haga copias de sí mismo, que un virus entre en una célula o salga de ella, o que refuerzan partes del sistema inmunitario del huésped. Aunque lo mejor, siempre, es la prevención mediante vacunas, que generan anticuerpos, mediante el mantenimiento de un sistema inmunitario sano, y mediante el cumplimiento cotidiano de medidas de higiene. No olvidemos que, el simple lavado de manos con agua y jabón, puede prevenir la transmisión de algunas infecciones víricas que se contraen por contagio directo, ya que las moléculas del jabón rompen la capa proteica de algunos virus.

HONGOS

Los hongos son organismos más grandes y complejos que las bacterias. Sus células poseen una membrana o pared gruesa de un compuesto (polisacárido) llamado quitina, que les provee rigidez y resistencia. No todos, pero sí la mayoría de los hongos, son parásitos, y pueden afectar tanto a especies vegetales cómo a especies animales.

En lo que respecta a las especies animales, pueden verse afectadas por una serie de hongos microscópicos llamados dermatofitos, que producen la llamada dermatofitosis.

De las distintas variedades de dermatofitos que pueden afectar a pequeños animales como nuestras mascotas:

  algunos se pueden encontrar en tierra rica en queratina o en otras tierras ricas en materia orgánica (dermatofitos geofílicos), cómo el microsporum gypseum,

 

  otros, tienen su orígen en el hombre (son parásitos obligados antropofílicos), cómo el trichophyton rubrum, que pueden infectar de forma ocasional a perros y gatos causando una zoonosis reversible,

 

  otros, tienen su orígen en animales (son parásitos obligados zoofílicos), cómo los trichophyton mentagrophytes y microsporum persicolor, que tienen cómo húesped a roedores silvestres, y pueden por contacto infectar a nuestras mascotas; y el microsporum canis (m canis)*, del que es huésped primario el gato.

* El microsporum canis (m canis), produce una de las infectaciones fúngicas, o por hongos, más temida en nuestras mascotas, la que conocemos cómo Tiña. Es un dermatofito que crece en las capas superficiales de la piel, pelo, y uñas, pudiendo causar importantes lesiones. Y, aunque el gato es su huésped primario, puede afectar también a otras especies, incluyendo perros y humanos.

Para más información sobre la dermatofitosis conocida cómo tiña, puedes echar un vistazo al post “Hongos Y Mascotas. La Tiña“.

Hasta aquí, esta breve clasificación de algunos de los patógenos que pueden afectar a nuestros hogares con mascotas.  Identificarlos, y conocer las consecuencias que pueden derivar, nos ayudará a desenvolvernos con mayor eficacia en la cotedianidad de los cuidados de nuestros amigos, a minimizar riesgos, y, en definitiva, a tomar las medidas más adecuadas para proteger a nuestros animales, cómo a la comunidad, frente a infecciones y parásitos.


 

FUENTES CONSULTADAS PARA LA REDACCIÓN DEL POST:

  •  fesemi.org – SEMI es el grupo de Educación en Salud para la Ciudadanía de la Sociedad Española de Medicina Interna (Salmonelosis)

 

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